El objetivo principal de esta actividad es retirar el mayor número de ejemplares de la especie invasora Onagra, sobre todo los de edad adulta que son peligros potenciales debido a su inmediata floración y suelta de semillas.
Los voluntarios que se acerquen a disfrutar de esta jornada, conocerán de primera mano la onagra, especie que en Cantabria prolifera principalmente en zonas dunares, aunque ya empieza a colonizar nuevos espacios como márgenes de carreteras y solares abandonados. También se colaborará en la plantación de especies dunares (barrón y festuca rubra).
Este monte, repoblado con pinos y eucaliptos, y de manera espontanea por encinas y laureles se sitúa sobre la duna terciaria forestada. Estas dunas, situadas al interior respecto del litoral, se asientan sobre suelos arenosos con mayor aporte de materia orgánica, frente a las dunas secundarias y primarias, lo que permite el desarrollo de especies vegetales arbóreas y arbustivas que son incapaces de crecer en las dunas primarias y secundarias.
La fauna más habitual es la propia de áreas costeras, concretamente las aves más habituales son gaviotas, correlimos, cormoranes, etc. No es difícil observar otras especies más generalistas como urracas o gorriones, e incluso aves nocturnas como el autillo. Los pequeños mamíferos, anfibios y reptiles son grupos de menor importancia en esta reserva.
El espacio no se libra de especies invasoras como el plumero y la onagra, que representa una dificultad añadida al desarrollo normal de las especies autóctonas. La erradicación de esta vegetación invasora es una de las estrategias principales de gestión y motivo principal por el cual se trabaja en el monte.
Fecha de celebración: 24 de septiembre