Acuerdo entre el Ayuntamiento de Liérganes y la Fundación Naturaleza y Hombre.

La reserva enmarca los valles de la Quieva y la cabecera de Las Porquerizas, situados en la zona sur del municipio, frente a las célebres Tetas de Liérganes.

Concretamente, se sitúan sobre el Barrio de Rubalcaba, donde los arroyos Quieva y Porquerizas donan sus aguas al río Miera, uno de los ríos pasiegos que aporta la mayor parte de sus aguas al estuario de la Bahía de Santander.

Los accesos se realizarán desde el Barrio de Rubalcaba, utilizando el desvío del Barrio de Porquerizas o La Quieva.

Este espacio natural se caracteriza por estar compuesto por un mosaico de hábitats o ecosistemas. Este mosaico se debe a la transformación producida por el sistema silvopastoral que ha regido en estos valles desde muy antiguo. Al visitar la zona podremos encontrar desde praderías de aprovechamiento forrajero, para la explotación agropecuaria extensiva; bosques de frondosas dominados por especies caducifolias como roble, haya, fresno, abedul, avellano, nogal. Por otro lado, y asociado a los arroyos Quieva y Porquerizas, aparece el típico bosque de ribera, donde crecen sauces, saúcos, alisos o abedules.

Dominando el valle de Quieva, encontramos el gran roquedo calizo de Peña Pelada. Esta zona constituye el hábitat preferente de especies como el halcón peregrino, el buitre o el alimoche. Además de estas especies, es posible observar otras aves como el gavilán, el ratonero o el arrendajo; mamíferos como el zorro, la garduña, la comadreja o el jabalí.

El uso ganadero secular de los valles nos permitirá identificar vestigios de las construcciones típicas pasiegas, con la presencia dominante de cabañas de piedra, algunas de las cuales se están rehabilitando. Nos hallamos ante una representación fidedigna de lo que ha sido y puede seguir siendo un típico valle pasiego, donde el patrimonio etnográfico se une a la biodiversidad.

Colaboradores:

• Ayuntamiento de Liérganes