El Club de Fincas combina la gestión de zonas de nidificación en la Sierra con la de las áreas de campeo y alimentación. La Sierra de Gata, así como las zonas limítrofes de Peña Francia y Las Hurdes, albergan una población reproductora de buitre negro cercana a las 107 parejas, lo que supone cerca del 7 % de la población española. A la vez, constituye el límite norte de su área de cría. Así mismo, las grandes extensiones de encinar existentes en la zona del Campo Charro y las amplias zonas de rebollar al sur del mismo, constituyen una de las principales áreas de alimentación de los núcleos poblacionales nidificantes en las sierras occidentales del Sistema Central.

La gestión de estas zonas de cría y alimentación garantizaría la viabilidad de la especie en la zona a medio y largo plazo, controlando y erradicando sus principales amenazas: degradación y simplificación del hábitat en zonas de cría y campeo, molestias en época reproductora y venenos.